Es sabido que los gatos duermen entre 16-18 horas al día de media y, como animales territoriales que son, adoran disponer de lugares privados para descansar cómodos y felices.
Aunque existe una amplia oferta de camas, colchones, mantas, cojines…. etc, la imaginación no tiene límites y cada gato, encontrará su dormitorio “ideal”, aunque casi todos coinciden en algunos detalles como estar situados en zonas alejadas del paso, normalmente elevadas y recogidas (pegadas a la pared o a las esquinas, por ejemplo). De esta forma, se sienten seguros y protegidos.
Ahí van algunos ejemplos pensados para otros fines y reutilizados por los gatos de casa como zonas de descanso (frutero, escurreplatos…) y uno específicamente fabricado para este fin y que resulta ideal para gatos que quieran “desaparecer” por un rato de la vista.
Hay más y la imaginación no tiene mayor límite que la seguridad a la hora de ofrecer alternativas de descanso a tu gato de casa.