Hay muchas cosas por descubrir sobre nuestros gatos. Ahí van unas cuantas curiosidades felinas.
A los gatos se los identifica por su nariz también llamada trufa. El ser humano tiene huellas dactilares únicas. La nariz del gato es su “huella dactilar” y también es única.
Los bigotes del gato, llamados vibrisas, se caen periódicamente y vuelven a crecer. Su desaparición, afecta al movimiento y al sentido de orientación del animal. Por eso, es importante no cortarlos. Un gato tiene cuatro hileras de bigotes a cada lado de la cara; Cuando el animal está tranquilo, permanecen de lado, mientras que se disponen hacia atrás si está en posición de ataque o defensa.
Cada gato tiene su propio maullido y ronroneo. Puede que dos gatos tengan un ronroneo parecido pero, a pesar de todo, siempre existe alguna diferencia. Además, pueden “vocalizar” en torno a cien sonidos diferentes.
El ronroneo no siempre significa tranquilidad. El gato también ronronea cuando está enfermo o asustado, y se dice que lo hace para tranquilizarse a sí mismo.
La lengua del gato está formada por pequeños “ganchos”, que les son útiles para atrapar y desgarrar el alimento. Además, no pueden percibir los sabores dulces.
Se creía que los gatos eran incapaces de distinguir los colores. Sin embargo, estudios recientes demuestran que pueden ver el azul, el verde y el rojo.
La visión nocturna del gato es alrededor de seis veces mejor que la del hombre gracias al Tapetum Lucidum, una estructura del ojo compuesta por células capaces de funcionar como espejos, amplificando el más tenue rayo de luz. Un dato adicional: La mayoría de los gatos carece de pestañas.
Los gatos duermen de 16 a 19 horas diarias. Pero aún dormidos, están alertas a cualquier estímulo. Además de hacerlo con la nariz, los gatos huelen con un órgano, llamado de Jacobson, situado en la parte superior de la boca.
Los gatos tienen cinco dedos en cada una de sus patas delanteras, y sólo cuatro en las traseras.
La cola es un órgano fundamental para el equilibrio del gato; funciona como una pértiga en manos del equilibrista o funámbulista.
El gato posee 32 músculos en cada oreja. Además, funcionan como antenas parabólicas y se dirigen hacia la fuente del sonido.
El gato puede percibir sonidos aproximadamente dos octavos más altos que el hombre.
Las patas de un gato son las partes más sensibles de su cuerpo… los innumerables nervios de las almohadas detectan la presión, la temperatura y el dolor.
Los gatos recién nacidos tienen los ojos azules. Transcurren varios meses hasta que alcanzan su color definitivo.
Las fosas nasales del gato tienen 19 millones de terminaciones nerviosas. Las del hombre poseen sólo 5 millones.
Las manchas de los Siameses en las patas, cola, orejas nariz y boca es donde tienen la temperatura del cuerpo más baja que en la parte que son blancos.
Existe una planta que fascina a los gatos. Les hace disfrutar de momentos sublimes durante unos minutos. Se trata de la nepeta cataria, también llamada menta o hierba de los gatos, de la familia del tomillo y la lavanda. Su perfume desencadena un comportamiento en el animal, similar al de una hembra en celo.